lunes, 5 de diciembre de 2011

L'ANSIÉTÉ

Los huesos de su espalda chocaron contra el somier
con un estrepitoso ruido, como el de un amasijo de hierros oxidados.
Una vez más sintió su cuerpo como un siniestro total, mientras terminaba de caer.


El tiempo parecía haberse detenido allí,
parecía que ya no fuera a ocurrir nunca nada.


Intentó darse la vuelta pero sus músculos no respondían, estaban agarrotados, dormidos, yermos
el dolor había desaparecido.


Sin embargo su respiración era agitada
tanto, que podía ver su pecho moverse a ritmo casi de allegro vivace.
Ay si hubiese adquirido esa misma maestría con las teclas de su piano !


También pudo ver su corazón latir dentro de su pecho, como queriendo escapar
podía sentir cada golpe, los oía, cada uno de ellos,
todo su interior convulsionaba, se estremecía, podía escuchar los ruidos de sus órganos,
con un compás de arritmia.


Sin embargo su cuerpo permanecía inmóvil, erial,
ni siquiera pestañeaba.


Habría querido gritar, llorar, arquearse o patalear, pero el terror le atenazaba,
no le dejaba escupir sus fantasmas,
por lo menos ahora sudaba.


Pudo notar una gélida gota correr por su frente, rodando hasta su ceja
y en un impulso involuntario doblando uno de sus dedos, notó sus uñas resbalando por la palma de su mano mojada,
empezó a romper su propia rigidez.


Cuando despertó, lo mismo que otras veces, no podía recordar el sol,
no sabía cómo ni cuándo empezó esta vez,
minutos ? horas ? quizá días...


Ni siquiera pudo reconocer la luz de fuera, si había sido de día o de noche,
sólo sabía que al otro lado de la ventana,
las tinieblas le habían vuelto a apresar,


y vuelta a empezar.

3 comentarios:

  1. Me gusta mucho, la atmósfera está muy lograda y el ritmo cobra intensidad conforme se va leyendo hasta que te atrapa. Un besito muy grande...

    ResponderEliminar
  2. Me alegro de que te guste y agradezco tu comentario, viniendo de alguien con tanto talento literario es todo un honor.

    Besos,

    ResponderEliminar
  3. No me digas eso que me pongo rojo. Tú también tienes mucho talento para escribir, es una sorpresa muuuy grata. Un besito

    ResponderEliminar

Nueva gota